Introducción al Templo Longze: Según la leyenda, a finales de la dinastía Song del Norte, el general que custodiaba la ciudad de Yifeng se dio cuenta durante su carrera militar de que "el camino de las artes marciales no es el arma final". La guerra es sólo un medio, no un fin, por lo que instaló un salón de Dharma en su casa y contrató monjes para que dieran conferencias en casa, enseñaran las Escrituras, practicaran el budismo y oraran por la paz en medio de la guerra. El general quedó tan conmovido por las enseñanzas de Kong que invitó a más amigos, funcionarios y nobles a compartir el Dharma. Posteriormente, cada vez más personas escucharon y donaron dinero para construir el templo. El general le pidió a Kong que le diera un nombre, y Ling Kong estaba agradecido por la amabilidad de la montaña Shenlong, por lo que la llamó "Templo Longze". Por lo tanto, el eminente monje Lukong comenzó a predicar y dar conferencias en la ciudad de Yifeng, difundiendo ampliamente el budismo y haciendo florecer el incienso.